Le podéis llamar efecto Proust o Ratatouille, da lo mismo. Lo que está claro es que Miramar es uno de los restaurantes que mejor se adapta a estos dos fenómenos gastrosensoriales, a saber, que un sabor nos despierte una memoria del pasado. Paco Pérez, el chef catalán con más estrellas Michelin, es un experto en emociones gastronómicas, y la suya es una cocina que habla de los veranos en la playa, de las comidas familiares y de las largas sobremesas mirando al mar.
Él mismo observa esa gran charca de agua, durante largos minutos, antes de empezar el servicio de un local que utiliza la gastronomía para remover recuerdos.
Miramar: Un restaurante que también es hotel
Antes de entrar en Miramar, fijaros en el piso de arriba del restaurante. Allí encontraréis las terrazas de las cinco habitaciones que ocupan la planta superior, reconvertidas en elegantes y amplias suites con vistas al Mediterráneo. La experiencia de cenar abajo y dormir arriba (hay packs especiales que incluyen ambas propuestas) es una de las más recomendables de la Costa Brava, y permiten reafirmar el espíritu familiar e integrador que recorre toda la filosofía del proyecto.
Fijaros, por ejemplo, en la entrada principal, repleta de fotografías en las que se puede apreciar los miembros de una familia que lleva décadas cuidando a los comensales. De hecho, la casa del chef y de su mujer Montse Serra son contiguas a las suites, cada una de las cuales está bautizada con el nombre de un alga marina distinta.
En el interior, encontraréis mobiliario e interiorismo de la también empresa familiar Euromoble de Bru, así como amenities de Algotherm, la marca francesa especializada en cosmética marina. Los libros también merecen una mención: la imperdible guía gastronómica Where Chefs Eat y el volumen Miramar editado por Montagud os invitarán a descubrir y entender la visión de distintos cocineros.
Un desayuno de primera
Mucho se ha hablado de la experiencia gastronómica de Miramar, que actualmente combina una carta basada en ingredientes del mar, del huerto y del bosque con dos fantásticos menús de degustación, el MAЯ 2022, con una veintena de pasos que recuperan recetas como el garum, y el Memoria, Territorio y Cultura, que reflexiona sobre los orígenes de las elaboraciones que conocemos. Lo que pocos gourmets saben, no obstante, es que la posibilidad de dormir en Miramar Rooms brinda una oportunidad realmente única: la de levantarse con un desayuno firmado por Pérez que rinde tributo a la artesanía gastronómica local.
Hablamos de un festín matutino en el que podréis probar zumos naturales, embutidos y queso del Ampurdán, así como dulces caseros y unos huevos benedictine que os reconciliarán para siempre con el mundo. Al salir, la sensación será inevitable: la de una pena muy grande por abandonar este pequeño lugar del mundo, tan mágico y tan reconfortante, en el que Paco y Montse llevan años demostrando que vale la pena desviarse hasta Llançà para apostar por la felicidad.
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