Entre la península de O Morrazo y Baiona se extiende la ría de Vigo, una de las más bonitas de la provincia gallega de Pontevedra. Su litoral está lleno de lugares de interés, fabulosas playas y pueblos en los que vale la pena detenerse.
Descubre esta zona de las Rías Baixas en tu próximo viaje y no olvides visitar los pueblos más bonitos de la ría de Vigo que te traemos hoy. Además, en cualquiera de ellos podrás degustar los mejores pescados y mariscos de la gastronomía de Galicia.
Baiona
Uno de los pueblos más bellos de la ría de Vigo marca uno de sus extremos: Baiona. Esta localidad histórica alberga un casco antiguo por el que te encantará callejear, antes de acercarte a descubrir la fortaleza de Monterreal, del siglo XV, que es todo un símbolo de la villa. Desde ella podrás contemplar unas espectaculares vistas de la ría y seguro que quitas más de una foto. Sigue el paseo de Monte Boi para admirar el entorno en todo su esplendor. Y tampoco olvides disfrutar de playas como Cuncheira, Barbeira y Riberia si el tiempo acompaña.
Entre los otros puntos de interés de Baiona, no te pierdas la iglesia gótica de Santa María, la Virgen de la Roca, el palacio de los Reyes de Galicia y la réplica de la carabela La Pinta. Y es que aquí llegó el navío trayendo la noticia del descubrimiento de América por parte de Cristóbal Colón. Cada primer fin de semana de marzo se celebra la Festa da Arribada, que recrea este acontecimiento histórico, en el que no faltan las justas y el Real Mercado Medieval. Está catalogada como Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Cangas
La villa marinera de Cangas do Morrazo constituye otro de los pueblos más bonitos de la ría de Vigo. Te encantará recorrer su antiguo barrio de pescadores y su puerto pesquero, además de contemplar monumentos como la excolegiata de Santiago y muestras de arquitectura tradicional como hórreos y cruceiros. De hecho, en Cangas encontrarás uno de los más famosos de Galicia: el cruceiro de Hío, del siglo XIX. Precisamente en O Hío se celebran cada primer domingo de junio las Fiestas del Cristo de la Luz y Fiesta de la Queimada, donde podrás degustar esta tradicional y legendaria bebida gallega.
En el litoral del municipio, puedes recorrer las rutas de senderismo de la Costa da Vela y acercarte a conocer el faro de Cabo Home, los acantilados de Donón y el Monte Facho. También podrás elegir entre sus más de 35 playas, asomarte a los miradores de la zona y subirte a algún barco que ofrecen las navieras para ir a visitar las maravillosas islas Cíes. Encontrarás mucho aparcamiento gratuito junto al puerto, así que es realmente práctico navegar desde aquí al Parque Nacional marítimo-terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia.
Moaña
El puente de Rande es uno de los lugares imprescindibles en la provincia de Pontevedra. Y es que es el que une el municipio de Moaña con Redondela. Al cruzar el puente atravesarás toda la ría de Vigo mientras contemplas desde sus vías las islas Cíes y la isla de San Simón. Es uno de los hitos de la ingeniería de nuestro país y se construyó en los años 70 del siglo XX, cuando se convirtió en el puente atirantado más largo de España.
Antes de llegar al puente, detente en el pueblo marinero de Moaña, a diez minutos en coche de Cangas. En él podrás visitar sus puertos pesquero y deportivo, pasear por la Alameda, ver templos como el de Nuestra Señora del Carmen y la playa de Moaña junto al Parque da Xunqueira. Y si te apetece una sencilla ruta de senderismo para recorrer en familia, te encantará el sendero del río Fraga.
De hecho, Moaña cuenta con varias fiestas gastronómicas que no te puedes perder si te coinciden en tu visita a las Rías Baixas. El 19 de marzo de celebra la Festa da Costeleta (Fiesta de la Costilleta); el primer domingo de julio, la Festa do Mexillón (Fiesta del Mejillón); el tercer domingo de julio, la Festa do Naseiro de Meira, en la que los protagonistas son las nécoras, los camarones y el pulpo; y la Romaría da Carballeira de Bronlle, una romería en el mes de agosto donde se degusta el tradicional cordero al espeto de Moaña.
Redondela
Al pueblo de Redondela se lo conoce como la Villa de los Viaductos, algunos de los cuales están catalogados como Monumentos Histórico-Artísticos. Pero no es lo único que hace tan especial a esta localidad gallega. Por Redondela transcurre el Camino Portugués. En su tercera etapa, el camino de peregrinación comunica la villa con Pontevedra, puesto que solo las separan unos 18 kilómetros.
Disfruta del paseo junto al arenal semiurbano de Cesantes, con más de dos kilómetros de longitud, visita el convento de Vilavella, del siglo XVI, y adéntrate en la villa para recorrer la popular calle Crespo. Desde ella podrás contemplar los viaductos, así que no guardes tu smartphone o tu cámara de fotos. El Viaducto a Madrid se inauguró en 1876 y era utilizado por la línea de ferrocarril que comunicaba Vigo y Ourense. El Viaducto de Pontevedra tuvo su inauguración en 1884, para comunicar la línea que conectaba el centro del país con la Ciudad Olívica y Pontevedra. Pero además de ellos, no olvides otros puntos de interés en Redondela como son la iglesia de Santiago Apóstol, del siglo XV, y la capilla de Santa Mariña.
Si estás pensando en planear una escapada para descubrir Redondela, recuerda que en mayo se celebran la Festa dos Maios, la Fiesta del Choco y el Festival Internacional de Títeres. Y ya en el mes de junio tiene lugar la Festa da Coca, el tradicional Corpus Christi con sus alfombras florales y festejos en los que se conmemora la victoria sobre el dragón que vivía en la isla de San Simón, que se remonta al siglo XV.
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