Algunas de las islas que te vamos a proponer a continuación son auténticos paraísos en la tierra. Todo el mundo sueña con poder visitarlas algún día y dejarse llevar por sus fascinantes paisajes y sus aguas turquesas y cristalinas. Son las 10 islas más paradisíacas del mundo, rincones de una belleza excepcional y volcadas completamente en el turismo.
Pero, como a buen seguro que habrá otras islas paradisíacas que nos dejaremos en el tintero, nos podéis ayudar con vuestros comentarios para completar una lista más extensa, ¿qué os parece?
Bora Bora
Situada en la Polinesia francesa, al noroeste de Tahití, es una isla del tipo atolón rodeada por una barrera de arrecife coralino y pequeños islotes. Apenas cuenta con 10.000 habitantes, una isla paradisíaca y mágica que en los últimos años se ha convertido en enclave propicio para una luna de miel de ensueño.
Uno de sus rincones más hermosos es Motu Tapu, un pequeño islote alargado con una vegetación exuberante y playas increíbles. Viajar a Bora Bora no es nada barato, pero si lo haces no te quedes sólo en sus playas, sino disfruta de su naturaleza, sus paisajes, sus actividades y su cultura popular.
Bali
Situada en Indonesia, es una de las islas más conocidas y turísticas del mundo. Conocida como la isla de los dioses, sus grandes reclamos son sus playas increíbles llenas de palmeras, repartidas por toda la línea de la costa, sus templos, la densa y exuberante jungla y sus pequeños pueblos con una maravillosa cultura.
En Bali se mezclan una enorme riqueza cultural, paisajes fascinantes y playas tropicales. Y, aunque sea bastante caro viajar hasta aquí, una vez en Bali todo es relativamente barato. Por cierto, si eres amante del surf o de los deportes acuáticos, Bali es todo un paraíso.
La Digue
La Digue es la cuarta isla habitada más grande del archipiélago de las Seychelles (en ella apenas viven 2.000 personas). Un auténtico paraíso de playas y en donde se encuentra la Reserva Natural de Veuve, hogar del atrapamoscas negro del paraíso, una de las especies de aves más raras del mundo.
La Digue es una isla pequeña, ya que solo tiene cinco kilómetros de longitud y tres de ancho, pero es la imagen más característica de las Seychelles. Playas de enormes palmeras y cocoteros, tortugas marinas y una calma exquisita. La Digue es uno de los mayores placeres que existen en el mundo.
Isla de Pascua
Patrimonio de la Humanidad desde 1995, la Isla de Pascua en Chile es posiblemente uno de los rincones más aislados del mundo. La incluimos en esta lista porque, realmente, todo lo que puedes ver y vivir en ella es un auténtico paraíso.
Su principal atractivo, y su imagen más simbólica, son los más de 900 moais que se extienden por toda la isla (sí, esas estatuas monolíticas esculpidas por los antiguos rapa nui). Sin embargo, en la Isla de Pascua hay también volcanes, playas de ensueño, cavernas y cuevas, etc… Te sentirás casi en otro mundo, disfrutando de un enclave único y deslumbrante.
Zanzíbar
Dicen los lugareños que cuando llegas a Zanzíbar, descubres el paraíso. Ubicada en Tanzania, el centro histórico de Ciudad Zanzíbar fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000. Sin embargo, su principal atractivo son sus fascinantes playas de arenas blancas y aguas cristalinas, los enormes cocoteros verdes, la densa y exuberante vegetación y la calidez de sus gentes.
Además, su cultura es muy rica y densa, ya que está influenciada por persas, árabes, musulmanes y portugueses. Lo cierto es que sus lugareños tienen toda la razón cuando hablan de ella como el paraíso.
Contoy
Esta pequeña isla mexicana se encuentra en el estado de Quintana Roo, muy cerca de Isla Mujeres. Declarada parque nacional en 1998, es conocida como la isla de los pájaros, ya os podéis imaginar el por qué. Al sur de Contoy se sitúa el arrecife de Ixlaché, que forma parte de la segunda barrera de arrecifes más grande del mundo.
Es una isla paradisíaca no solo por sus paisajes, sino también por ser muy tranquila y apacible. En ella solo pueden entrar un máximo de 200 turistas al día y, si no tienes un permiso especial, no puedes alojarte en ella para pasar la noche.
Boracay
Esta isla tropical de Filipinas es uno de los destinos turísticos más populares del país. Cuenta con unos 20.000 habitantes y su gran reclamo son sus fascinantes playas de aguas cristalinas y arenas muy finas y sus arrecifes de coral, un auténtico paraíso para los amantes del submarinismo.
Casi todos los años, la playa de Boracay aparece en las principales listas de las mejores playas del mundo. Pero, curiosamente, también recibe el apelativo de la Ibiza de Filipinas por su trepidante vida nocturna, otro de sus grandes alicientes. Ir de fiesta a Boracay sí que puede resultar un paraíso, ¿no crees?
Kauai
La isla de Kauai es la más antigua y la cuarta más grande del archipiélago de Hawai. Conocida como la Isla Jardín, es muy montañosa y de origen volcánico, siendo también uno de los lugares más húmedos de la Tierra. Todo esto provoca que cuente con una vegetación impresionante, que se extiende por sus profundos valles y cañones.
Además las constantes lluvias hacen que se formen fascinantes cascadas, por lo que su carácter paradisíaco tiene que ver especialmente con su maravillosa naturaleza. Si te gusta el senderismo y las actividades al aire libre, en Kauai encontrarías tu reino preferido.
Maldivas
Más que una isla en sí, Maldivas es un archipiélago del océano Índico formado por 26 atolones y 1.200 islas, de las cuales solo 203 están habitadas. Todas ellas son muy pequeñas y están rodeadas por un increíble color azul turquesa. Su fondo marino es uno de los más excepcionales del mundo, por lo que resulta un destino muy especial para los amantes del submarinismo.
En Maldivas, además de bucear, puedes disfrutar de sus paisajes, pescar, visitar cualquiera de sus islas o perderte en alguno de sus rincones deshabitados en una escapada romántica.
Santorini
No queríamos acabar nuestra lista sin mencionar alguna isla europea. Y de todas ellas, posiblemente la más paradisíaca sea Santorini, una lugar con una belleza plástica y elegante increíble. Hermosa por sus playas volcánicas de Perissa y Kamari, pueblos pintorescos con sus pintorescas casas blancas de cúpulas azules, y unas vistas panorámicas realmente fascinantes.
Santorini es la isla griega por excelencia, una auténtica joya en la que cada detalle es de enorme belleza. Llegar a Santorini en barco y contemplarla desde el mar sí que es un verdadero paraíso.
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