Ya estamos en pleno verano y, en esta época del año, en España son muchas las fiestas que se organizan a lo largo y ancho del país. Pero más allá de las típicas verbenas, conciertos y ferias medievales, hay algunos festejos que destacan por su originalidad y ciertas dosis de locura o desenfreno.
Así que si te apetece pasártelo en grande durante tus vacaciones o escapadas durante esta época del año, no te pierdas las fiestas tradicionales más locas de España. Vale la pena asistir a ellas aunque solo sea una vez en la vida.
Batalla del Vino de Haro (La Rioja)
A finales de junio se celebra la Batalla del Vino de Haro, en la localidad homónima de La Rioja. Cada 29 de junio el vino se convierte en el protagonista en una batalla campal donde se derraman alrededor de 130.000 litros de este líquido.
Las reglas para participar son claras: vestir de blanco con pañuelo rojo, conseguir manchar de vino al prójimo lo más rápido posible y usar armas homologadas que puedan llenarse de vino, como botas, pistolas de agua, calderos y botellas que no sean de vidrio. Recuerda llevar ropa cómoda y reservar alojamiento con antelación, porque durante estas fechas es difícil encontrar plazas libres. Y no olvides aprovechar para visitar las bodegas de la zona, uno de los destinos imprescindibles para los amantes del enoturismo.
Romería de Santa Marta de Ribarteme (Pontevedra)
Entre las romerías más populares de Galicia, hay una que ha alcanzado fama internacional. Nos referimos a la Romería de Santa Marta de Ribarteme, en el municipio de As Neves, en la provincia de Pontevedra. De hecho, hasta el diario The Guardian la catalogó como una de las fiestas más raras del mundo. Y es que la procesión que se celebra en esta localidad de interior, próxima a la frontera con Portugal, es muy particular.
Aquellos vecinos que han estado enfermos de gravedad o han vivido alguna experiencia próxima a la muerte se introducen en ataúdes y luego son portados a hombros por los vivos para salir en procesión en torno al santuario. Si quieres contemplar el singular desfile de féretros en vivo y en directo, solo tienes que acudir algún 29 de julio a la parroquia de Santa Marta de Ribarteme.
La Tomatina de Buñol (Valencia)
Seguramente, entre las fiestas más locas de España, la Tomatina de Buñol sea de las más famosas. Se celebra en el pueblo valenciano de Buñol y, cada año, son miles de personas las que participan en un evento en el que se arrojan hasta 150 toneladas de tomates en una frenética batalla. Desde el año 2002 el acontecimiento está declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional y tiene lugar a finales de agosto. En la edición del 2023 tiene lugar el 30 de agosto, y unos días antes, el 24 de agosto, se organiza la Tomatina infantil, protagonizada por los niños.
Y no olvides visitar en la localidad el Museo de la Tomatina (C. Pelayo, 12, 46360 Buñol, Valencia), ubicado en el edificio Molino Galán de Buñol, al lado de la Oficina de Turismo. A través de fotografías, una sala inmersiva de 270º y una zona de realidad virtual podrás vivir la experiencia de la Tomatina en cualquier momento del año.
La Nochevieja de Agosto en Bérchules (Granada)
Celebrar el tradicional Fin de Año en pleno mes de agosto suena un poco loco de por sí, pero esto es lo que sucede durante la fiesta de Nochevieja de Agosto en el pueblo granadino de Bérchules. No es que se trate de una tradición muy antigua, puesto que se instauró en el año 1994, pero desde entonces se ha convertido en uno de los festejos más representativos de la localidad.
Comenzó a celebrarse por aquel entonces después de que un apagón impidiera que se celebrara en el municipio la Nochevieja en el mes de diciembre. De tal modo, como no están dispuestos a volver a quedarse sin tomar las uvas, se organiza este Fin de Año veraniego cada primer fin de semana de agosto. En el evento no faltan las uvas, el turrón, las campanadas y la cabalgata de los Reyes Magos.
El Cipotegato de Tarazona (Zaragoza)
El 27 de agosto se celebra en la localidad zaragozana de Tarazona la fiesta de El Cipotegato. Es otra de las más originales y curiosas de nuestro país. Durante la misma, la figura del Cipotegato, una especie de bufón vestido como un arlequín, recorre el pueblo a las 12 del mediodía mientras vecinos y visitantes le tiran tomates. Así dan comienzo las fiestas de Tarazona en honor a fiestas en honor a San Atilanoa, donde no faltan ni las verbenas ni los bailes típicos ni los pasacalles. Están catalogadas como Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Como curiosidad, cabe saber que la figura de El Cipotegato es elegida entre los jóvenes de la localidad mediante sorteo. Además, su identidad se mantiene en secreto hasta que no regresa a la casa consistorial tras los festejos.
Romería Vikinga de Catoira (Pontevedra)
Si hay que hablar de una fiesta histórica de carácter tradicional en la que hay bastante desenfreno, es necesario mencionar la Romería Vikinga de Catoira, que se celebra el primer domingo de agosto desde el año 1960, aunque a lo largo de esa semana se suceden numerosos actos y actividades.
El evento recrea el desembarco vikingo en esta costa de la provincia de Pontevedra, en las tierras de Ulla, donde eran frecuentes los ataques de estos piratas del norte. Es todo un espectáculo ver a embarcaciones vikingas como el drakker arribar a la costa en el entorno de las Torres del Oeste. Aunque durante el ataque, no corre la sangre, sino el vino. Y es que durante la contienda entre los vecinos que intentan resistir los ataques y los vikingos, el vino es un arma fundamental, por lo que también se convierte en protagonista de una batalla en la que, al final, la música, la gastronomía y la confraternización son las que ganan la batalla.
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