Entre el patrimonio civil de nuestro país, contamos con destinos de elevado interés cuando hablamos de enoturismo, lugares que no siempre tiene todo el mundo en cuenta, aunque deberían. Y es que descubrir la tradición vitivinícola española y degustar sus vinos y su gastronomía siempre incrementa el placer de una excursión o un viaje.
Prueba de ello son algunas de las bodegas más bonitas de España que te traemos hoy. Te contamos todo lo que tienes que saber sobre ellas y qué opciones ofrecen para visitarlas en cualquier momento del año.
Cavas Codorníu
Una de las obras más destacadas del modernismo catalán tiene una relación directa con el vino espumoso. Nos referimos a las Cavas Codorníu, catalogadas como Monumento Histórico-Artístico, y en las que destacan sus arcos, sus bóvedas de ladrillo y sus ventanales. No es de extrañar que sean unas de las más visitadas del país.
Las Cavas Codorníu se distribuyen en varios edificios: el Porche de las Prensas, donde está el museo, la Sala de Expediciones, la Bodega Grande y la casa solariega. Se ofrecen diferentes visitas para conocer sus instalaciones, visitar los edificios y degustar sus cavas, como la visita Codorníu o la visita Anna.
Peralada
Entre las hermosas bodegas a lo largo y ancho de nuestro país, tenemos la suerte de contar con muchas de ellas históricas en impresionantes edificios que nos hacen soñar. Así sucede con el castillo de Peralada, en el que se elaboraban vinos hace muchos siglos atrás. El conjunto monumental que conforman el castillo, la iglesia y el convento fue adquirido en 1923 por Miguel Mateu que revitalizó la actividad vitivinícola, amplió la biblioteca del convento y salvaguardó sus colecciones de pinturas, esculturas, monedas y cerámicas, entre otras.
En la actualidad, el convento alberga el Museo del Vino, donde se pueden contemplar los utensilios de la primera bodega; la biblioteca es una de las más importantes del país con unos 80 000 volúmenes; y se conservan las cavas subterráneas. Todo el conjunto puede visitarse.
Abadía Retuerta
En la segunda mitad del siglo XII se fundó la Abadía de Santa María de Retuerta, en el municipio de Sardón de Duero, en Valladolid (Castilla y León). Los documentos históricos testimonian que en las tierras de su entorno se cultivaba la vid. En 1988 el Grupo Novartis adquirió el conjunto y regresó a la tradicional actividad, creando la Bodega Abadía Retuerta, denominada en la actualidad, Abadia Retuerta Le Domaine.
El conjunto de la abadía cuenta con un refectorio, la cueva de los monjes, la sala capitular, la iglesia , la sacristía y la hospedería, convertida en un hotel de 5 estrellas. Con todo ello, las actividades enoturísticas que aquí se ofrecen son variadas para que puedas conocer las bodegas, con la sala de elaboración y la sala de las barricas, y recorrer los viñedos de la forma que más te apetezca, ya sea a pie, a caballo, en un circuito en vehículo todoterreno o incluso sobrevolándolos en helicóptero.
Pazo de Rubianes
Uno de los pazos más bellos de Galicia en las Rías Baixas también constituye una de las bodegas más bonitas de la península. Se trata del Pazo de Rubianes, un ejemplo de la arquitectura civil gallega en el que, además del edificio histórico de piedra, destacan sus impresionantes jardines.
La visita al pazo incluye el recorrido por ellos, además de por el viñedo, la visita a la capilla y al resto de construcciones del siglo XVI y el acceso al edificio principal, que conserva su suntuoso mobiliario y decoración de época en un auténtico viaje al pasado. No puede faltar la visita a la bodega y la degustación de una copa de vino albariño.
Bodegas Marqués de Riscal
Los edificios más vanguardistas también forman parte de estos lugares enoturísticos que merece la pena conocer, como las bodegas Marqués de Riscal, que también incluyen en su conjunto un espectacular hotel de 5 estrellas. Toda la extensión se conoce como la Ciudad del Vino de Marqués de Riscal, y ofrece la posibilidad de visitar la bodega original del siglo XIX, en donde se encuentra la botellería de vinos antiguos, denominada La Catedral y que todavía guarda botellas de la primera añada de 1862.
De igual modo, puedes adentrarte en el edificio El Palomar, de 1883, y asombrarte ante el Hotel Marqués de Riscal, diseñado por el arquitecto Frank O. Gehry. Puedes seleccionar entre varios tipos de visitas a partir de 19 euros para conocer las bodegas y los viñedos, las cuales incluyen una cata de vinos. Si lo prefieres, puedes concertar catas privadas.
Bodegas Portia
El estudio de arquitectura Foster & Partners fue el responsable del proyecto de Bodegas Portia, que se inauguró en el año 2010. Como resultado, podemos admirar un edificio con forma de estrella de tres puntas en el que se combina la madera, el vidrio y el hormigón.
Puedes visitar las bodegas y degustar sus vinos y un aperitivo. Aunque si lo prefieres, también se organizan visitas exclusivas. Y siempre tienes la posibilidad de disfrutar de una excelente comida o tapeo en el Triennia Gastrobar.
Bodegas Protos
Otras instalaciones espectaculares son las de Bodegas Protos. Diseñadas por Rogers Stirk Harbour y Alonso Balaguer y Arquitectos Asociados, cuentan con 19 450 metros cuadrados de superficie y se alzan en el cruce entre una antigua calzada romana y el Camino de las Eras, a los pies del castillo de Peñafiel, uno de los más bonitos de España.
Estas nuevas bodegas se comunican además de forma subterránea con las antiguas, así que te sorprenderá la fusión entre el pasado y el presente cuando las conozcas. La visita a Protos incluye el recorrido por todas las bodegas, a través de 2 kilómetros de galerías subterráneas, una cata de vinos y un obsequio.
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