En general, el encanto de la ciudad andaluza brilla durante todo el año. Sin embargo, quienes hemos tenido la suerte de visitarla coincidimos en que la primavera es la mejor época por muchas razones.
Para empezar, el clima es mucho más favorable. La temporada trae consigo muchos días soleados, pero con temperaturas que oscilan entre los 20 y 25 grados, lo que favorece la posibilidad de escudriñar hasta el último rincón. Asimismo, coincide con muchos de los eventos más importantes del año.
Viajar a Córdoba en marzo
Si tienes la libertad para organizar la visita, la recomendación es elegir el mes de marzo. Aunque en las guías de PetitFuté puedes encontrar la información necesaria para planificar el itinerario, te adelantamos que las mejores propuestas de entretenimiento giran en torno a la naturaleza.
El aroma de las flores perfuma la ciudad entera y brinda la oportunidad de conocer los secretos que esconde el principal centro histórico de Europa, sin preocuparse por la masificación turística.
Viajar a Córdoba en abril
La entrada de la primavera refleja la privilegiada ubicación de la ciudad, los paisajes naturales alcanzan su mayor esplendor e invitan al disfrute de actividades al aire libre.
Abril es el mes perfecto para recorrer los patios y jardines del Alcázar de los Reyes Cristianos. Los amantes de la naturaleza tienen cita obligada en la Vía Verde del Aceite o la Vía Verde de la Campiña, dos de las rutas de senderismo más impresionantes de la provincia.
Viajar a Córdoba en mayo
El buen clima se entrelaza con la celebración de eventos locales que forman parte de la cultura andaluza, para darle al visitante experiencias inigualables. La tradición cristiana de las Cruces de Mayo marca el inicio de las festividades.
A lo largo de cinco días, los cordobeses adornan sus cruces con flores esperando convertirse en el ganador del premio que ofrece el Ayuntamiento.
Más tarde, entre la segunda y tercera semana del mes, se celebra el Festival de los Patios, el cual brinda acceso a 50 patios privados que deleitan los sentidos a través de un festín de fragancias y colores. Mayo se despide con broche de oro, gracias a la Feria de Nuestra Señora de la Salud, donde se celebra la cultura local.
Lo mejor para ver y hacer en Córdoba durante la primavera
La provincia andaluza se viste de gala durante la primavera y ofrece a los visitantes dos eventos imperdibles: la Batalla de las Flores y el Festival de los Patios. Asimismo, es posible disfrutar de la Semana Santa y la Feria.
El inicio de la temporada resulta propicio para conocer las maravillas que convergen en el casco central, entre los que se incluye la Mezquita-Catedral, el icono de la ciudad y una joya de la arquitectura que combina los estilos árabe, renacentista, barroco y gótico.
Córdoba es una ciudad multicultural y rica en historia, algo que podemos apreciar muy bien después de visitar el Barrio Judío, un auténtico laberinto de calles empedradas y estrechas, enmarcadas en piezas clásicas de la arquitectura andaluza.
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