¿Tienes que afrontar un vuelo largo de varias horas por cuestiones de trabajo o por vacaciones? No es precisamente el mejor momento para hacer esta pregunta, pero esperamos que esta crisis pase pronto y leas este artículo más adelante. Los viajes largos suelen ser un poco pesados, y en un avión las molestias se multiplican, ya que no te puedes mover demasiado. Dolores de espalda, piernas hinchadas, cansancio, aburrimiento…
Afortunadamente, las compañías aéreas nos suministran consejos y recomendaciones para aguantar este tipo de vuelos. Nosotros queremos proponerte algunos de ellos para que los tengas en cuenta en tu próximo vuelo largo. Te vendrá muy bien seguirlos.
Elegir el asiento adecuado
Si tienes que facturar equipaje, lo más recomendable es llegar con suficiente tiempo de antelación al aeropuerto. No es muy conveniente comenzar un vuelo largo con prisas, de ahí que si puedes incluso hacer la facturación online desde casa mucho mejor. Así también podrás elegir tus asientos en el avión, preferiblemente los que están situados en el pasillo de las puertas de emergencias y lejos de los baños.
Los asientos que están junto al pasillo son los que te van a permitir tener una mayor movilidad. No tendrás que estar pidiendo permiso continuamente para salir y estarás mucho más cómodo para mover las piernas.
Ropa cómoda para el viaje
Una de las máximas para poder disfrutar de tu vuelo por largo que sea es vestirse cómodo. Lo más recomendable es vestir con telas flexibles y transpirables como el lino o el algodón, además de llevar zapatos que no aprieten. Lleva pantalones anchos y cómodos y evita las medias o los pantys.
Las camisas o camisetas que sean holgadas y procura llevar siempre contigo una chaqueta o un suéter para cubrirte (incluso en verano), ya que el aire acondicionado de los aviones provoca que la temperatura en el interior suela ser baja. En un viaje largo es probable que en algún momento del mismo puedas tener frío.
Entretenimiento durante el vuelo
Si el vuelo es largo, todo entretenimiento que lleves será bien recibido. Libros, revistas, e-book, dispositivos electrónicos, iPad, etc… Hay mil cosas para llevar y entretenerte durante el viaje. También puedes recurrir a la alternativa de ocio que te ofrecerán en el avión.
Es probable que haya algunos servicios por los que tengas que pagar un poco más en tu billete, pero en muchas ocasiones es recomendable para paliar el aburrimiento. Lo dicho, si no puedes dormir durante el vuelo largo cualquier distracción que tengas bienvenida sea.
La hidratación es fundamental
El aire acondicionado de los aviones produce una gran sequedad. Es muy recomendable beber mucha agua y llevar crema hidratante (el envase no puede superar los 100cc para que pueda pasar por la zona de embarque). Además, dentro de la cabina apenas hay humedad, por lo que debes hacer todo lo posible para mantener la hidratación.
Lo mejor es beber mucha agua, evitando el café y el alcohol. La cafeína no le va a venir bien a tu organismo en este tipo de vuelos largo. Asimismo, es preferible no llevar lentillas durante los vuelos que duran muchas horas.
Antifaz, tapones para los oídos o almohada para el cuello
Estos tres objetos no deberían faltar en tu equipaje de mano durante un vuelo largo. El antifaz te ayudará a desconectar e intentar dormir un poco sin luz. Los tapones para los oídos (o incluso unos auriculares) evitarán que tengas que escuchar ruido del exterior y aislarte mejor.
Y la almohada para el cuello es muy recomendable para que las cervicales descansen mejor y dormir sin ocasionar demasiadas contracturas. De los tres es especialmente recomendable la almohadilla, ya que te ayudará a mantener el cuello rígido durante el vuelo largo.
Ejercicios y estiramientos durante el vuelo
En la medida de lo posible, hay que hacer algunos ejercicios y estiramientos durante el vuelo largo. Precisamente, hay muchas aerolíneas y compañías aéreas que entre sus instrucciones incluyen pequeñas indicaciones e instrucciones para hacer este tipo de ejercicios en los vuelos transoceánicos.
Estos ejercicios y movimientos tienen como objeto evitar la hinchazón en las piernas y el malestar. Entre ellos estarían elevar los pies, estirar los brazos o elevar los hombros. Lo más sencillo es levantarse y dar unos pequeños paseos por el pasillo para estirar las piernas.
Reduce al máximo tu equipaje de mano
La mayoría de la gente utiliza demasiado equipaje de mano para los vuelos largos. Lo ideal no es llevar muchas cosas, sino lo necesario. Con una mochila te puede bastar, ya que además será más fácil encontrar lugar en los compartimentos superiores o debajo del asiento.
En esa mochila debes incluir el pasaporte y los billetes, el contenido de tus bolsillos, una batería portátil para tus dispositivos electrónicos, una memoria USB con películas, vídeos, etc…, auriculares con cancelación de ruido, algún medicamento, cepillo de dientes y una muda, alcohol en gel y toallitas húmedas… Es decir, lo básico y necesario.
Procura no mirar mucho el reloj
En un vuelo largo, hay que evitar estar pendientes del reloj y de la hora de llegada. Las prisas no son buenas compañeras, y menos en este tipo de viajes. El estar continuamente pendiente del reloj provocará que surja la impaciencia y eso nos afectará en el descanso. Un viaje largo es un poco pesado, así que intenta pasarlo lo mejor posible.
La sensación que te dará al mirar tantas veces el reloj será la de un vuelo incluso mucho más largo. Tampoco es recomendable mirar el mapa de a bordo que indica dónde nos encontramos y la posición actual del avión.
Revisa tus comidas
Las aerolíneas y compañías aéreas ofrecen un menú muy variado para sus vuelos largos. Si necesitas algún tipo de dieta especial, debes comunicarlo en el momento que reserves tu billete y cerciorarte de que tu solicitud ha llegado correctamente.
Es recomendable que vuelvas a revisar que todo está en orden al menos 24 horas antes de tu vuelo, ya que de lo contrario podrías pasarte todo el viaje sin comer nada por culpa de una equivocación. Por este motivo, incluye en tu equipaje de mano algo de comer: snacks, patatas fritas, bocadillos, sandwiches, etc…
Prepárate para el Jet Lag
Los vuelos largos son la antesala del temido jet lag. Lo ideal sería adaptarse cuanto antes (nada más subir al avión) al horario del país de tu destino. Si viajas hacia el oeste, es conveniente que un par de días antes de tu vuelo largo comas y te acuestes un poco más tarde de lo habitual. Si lo que viajas es al este, lo recomendable es que comas y te acuestes un poco antes.
Además, trata de no hacer comidas pesadas el día anterior al vuelo y durante el viaje, duerme durante el vuelo, evita el café y las bebidas alcohólicas y toma algún suplemento alimenticio como la melatonina.
Únete a la conversación